Un informe de ESET Security afirma que más del 70% de las empresas en América Latina considera que los riesgos relacionados a la seguridad informática tienen una máxima o alta preocupación.
La compañía de software de ciberseguridad compartió su último reporte, evaluando el nivel de preocupación asociados a diferentes riesgos e incidentes de seguridad, reflejando el comportamiento y la preocupación que tienen las organizaciones con respecto a este ámbito.
Lo cierto es que el nivel de preocupación que representa para las empresas la ciberseguridad ha crecido notablemente, con un 28% que indica que es de máxima preocupación, mientras que otro 42% muestra una preocupación alta, sumando además un 20% de organizaciones que afirman que el nivel de preocupación es significativa.
Otro apartado que se muestra en el informe habla acerca de las medidas de seguridad que suelen implementar las empresas para protegerse de ataques cibernéticos u otros incidentes.
La respuesta más reiterada resultó ser un Firewall de red, utilizado por el 88% de las organizaciones encuestadas, seguido cercanamente por soluciones de respaldo de información con un 85% y redes privadas virtuales (VPN) con un 80%. Apenas un 64% es la tasa de adopción con respecto a las soluciones antimalware, la cual suele ser la opción más nombrada ante potenciales medidas de seguridad.
Y para probar qué tan seguras son estas medidas se suele utilizar pruebas de penetración, la cual es implementada por el 64% de las compañías al menos una vez, en contraste con el 25% que mencionó no haber realizado nunca.
Además, apenas el 50% de las compañías aseguró contar con un segundo factor de autenticación (2FA) en sus cuentas, siendo una de las alternativas más efectivas para protegerlas, contrarrestando el inconveniente de las contraseñas débiles.
En una sección algo más positiva, un 83% afirmó contar con políticas de seguridad y un 52% con un plan de respuesta a incidentes. En adición, un 69% realiza un análisis de riesgo de seguridad por lo menos una vez al año, siendo una práctica de gestión útil para medir qué tan expuesta puede estar una organización ante posibles ataques, tanto internos como externos.
Por último, si hablamos de los diferentes modelos de trabajo con respecto al área de la ciberseguridad tenemos un claro predominio del trabajo híbrido, con un 62% de las compañías encuestadas funcionando bajo este modelo, con solamente un 3% que lo hace totalmente a distancia, una clara tendencia a la baja si tomamos en cuenta lo sucedido durante la pandemia del coronavirus.
El resto de tópicos y estadísticas se hallan en el informe completo.